Desde que Luis Sergio Torres emprendió su trayectoria profesional, siempre ha querido tener presentes los principios de transparencia y lealtad al cofrade y al cliente. Es para él de vital importancia la relación con el cliente, haciéndole partícipe de la obra y de su proceso creativo, considerando sus sugerencias.

La labor del imaginero presenta dos vertientes claramente identificadas. Por un lado, la imaginería tradicional realizada de forma exclusiva y, por otro, la firma “Siglo Barroco”, que realiza todo tipo de imágenes religiosas con la participación de más artistas.

En el primer caso, las obras se realizan por encargo de cofradías e iglesias, se utilizan materiales nobles como la madera de cedro y se sigue un proceso artesanal sobre boceto en barro que adquiere y aprueba la cofradía de forma exclusiva. El imaginero firma la obra con el nombre de Luis Sergio Torres Romero.

En el segundo caso, ya con la firma SIGLO BARROCO en la que participan más artistas, se realizan gran cantidad de trabajos en dos vertientes: unos de forma exclusiva y otros realizados en series de x piezas (dependiendo del coste). Estas obras se comercializan en distintos establecimientos religiosos de España, Italia e Hispanoamérica.

Por ello la labor diaria de Luis Sergio en el taller es doble, realiza las imágenes destinadas a cofradías que firma con su propio nombre, y dirige a los artesanos de Siglo Barroco en las obras que estén realizando para tiendas y particulares.

Cuando se accede al taller de Luis Sergio, se retrocede al mundo del barroco y quedamos embriagados por los aromas a incienso y cedro y cautivados por los sonidos tradicionales del escultor, que modela a golpe de gubia y de raspines. Es una sensación única, muy espiritual y que impregna de religiosidad las obras que allí están siendo ejecutadas.